¿Qué es la astenia otoñal?
Es un cansancio físico que impide a nuestro cuerpo realizar tareas cotidianas que normalmente no nos genera ningún esfuerzo. Debemos saber que la astenia no se trata de esa sensación de estrés o agotamiento que se produce luego de un esfuerzo o cansancio diario y que normalmente se quita con un buen descanso, sino que es una alteración del estado general y que puede provocar diversos trastornos. Ambos sexos pueden contraer la astenia, es decir, la pérdida de fuerzas general del cuerpo, la sensación de debilidad en los músculos, la fatiga y el agotamiento físico, aunque es más frecuente en mujeres.
¿Cuáles son las principales causas de la astenia?
Hay muchos factores que pueden generar astenia, los más frecuentes suelen estar relacionados a cuadros de ansiedad, angustias, preocupaciones y/o depresiones, como así también generados en menor medida por enfermedades pulmonares, neurológicas, reumatológicas o por infecciones virales. Hay que tener en cuenta que la astenia afecta sobre todo a mujeres embarazadas, personas que están envejeciendo, personas con anemia, personas con problemas de tiroides, personas sedentarias, y/o personas con las defensas bajas.
¿Es posible que los niños sufran de astenia?
Cada vez es más frecuente conocer niños y adolescentes con astenia, este síntoma nace muchas veces por la demanda escolar y el exceso de actividades que hacen colapsar al niño. En el caso de los adolescentes se agrega el trastorno del sueño que aumenta la probabilidad de contraer astenia ya que provoca falta de energía, irritabilidad con su entorno, problemas de sueño, falta de apetito, etc. Es importante estar alertas ante posibles cambios de humor, aumento de cansancio o debilidad corporal de nuestros niños. Algunas de las disciplinas que podemos adaptar para ayudar y mantener el metabolismo activo de los más pequeños es respetar la alimentación, tener una dieta variada y equilibrada, con mayor cantidad de frutas y verduras y menos azúcares y alimentos con grasas saturadas, respetar las horas de sueño en el horario indicado, realizar alguna actividad física de 30 minutos diaria, estar bien hidratado, y tomar omega 3 que poseen alimentos tales como el salmón, el atún, semillas de chía, o nueces entre otros.
¿Cómo se puede evitar la astenia?
Tener un estilo de vida activo y saludable hará que tu cuerpo cumpla un correcto funcionamiento físico y psicológico. Para llevar a cabo esto hay que intentar tener un dieta variada y equilibrada, hacer deporte de manera constante al menos media hora al día, hidratarse lo suficiente, dedicar un tiempo del día para uno mismo y hacer alguna actividad creativa y manual que te alegre el alma, buscar un tiempo de tranquilidad en donde abunde la calma y el silencio para despejar y relajar la mente, y tener un buen descanso son alguna de ellas.
